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Factores que pueden afectar al precio final del transporte marítimo 

Factores que pueden afectar al precio final del transporte marítimo

El transporte marítimo es una de las modalidades más populares para el comercio internacional, ya que permite trasladar grandes volúmenes de carga a largas distancias y a un bajo costo. 


Sin embargo, su precio no es fijo ni uniforme, sino que depende de variables que cambian según las condiciones del mercado, la disponibilidad de espacio en los buques, la competencia entre las navieras y los transitarios. 

 
Como ves, para determinarlo es clave conocer y analizar los distintos factores que intervienen en el cálculo final, así como las posibles incidencias que ocurren en el proceso. 

 
Es por eso que con este artículo queremos que tengas una visión completa y así tomar decisiones informadas, optimizar tus operaciones y mantener la competitividad en el mercado global. 

 
¿Qué factores debe considerar la gestión del transporte? 

 
Cuando hablamos de la gestión del transporte marítimo nos referimos a la planificación, organización, control y supervisión de todas las operaciones relacionadas. Desde la contratación del servicio hasta la entrega de la carga. 

 
Para garantizar un procedimiento exitoso, es básico tomar en cuenta una serie de factores claves que influyen en su eficiencia y costo: 


  •  Origen y destino. Hay que tomar en cuenta las condiciones geográficas, climáticas, políticas y legales de los lugares, así como las rutas y los puertos más convenientes para realizar el trayecto. 

 
Por ejemplo, si hay que llevar mercancías desde Asia a Europa, es mejor evaluar si es más conveniente utilizar el Canal de Suez o el Cabo de Buena Esperanza. 


  •  Tipo de carga. La naturaleza de la carga influye en la elección de los contenedores y equipos de manipulación necesarios. 

 
Ya sean a granel, líquidos, mercancías peligrosas o productos perecederos tienen requisitos específicos que deben ser considerados en la planificación. 


  •  Contratos con navieras. Negociar acuerdos con navieras influye significativamente en los costos, los tiempos de tránsito y la disponibilidad de espacio en el barco. 

 
De hecho, la elección entre un contrato de flete fijo o uno basado en tarifas variables debe evaluarse con cuidado. 


  •  Gestión de inventario. Es importante equilibrar la disponibilidad de productos con los costos de almacenamiento y transporte marítimo. La sincronización de los pedidos y entregas sirve para evitar excesos o faltantes. 
  • Seguridad y cumplimiento normativo. Incluye el resguardo de la carga, los controles aduaneros, las restricciones medioambientales y las leyes laborales. 
  • Tiempos de tránsito. Cada empresa debe considerar este factor al planificar sus envíos, en especial aquellas industrias sujetas a estacionalidad. 
  • Costo y tiempo.  Hay que tomar en cuenta los recursos disponibles, las tarifas vigentes, los impuestos, los seguros, los gastos operativos y los posibles imprevistos que afectan el servicio. 
  • Tecnología y seguimiento. El uso de sistemas de control y gestión de flotas permite una supervisión en tiempo real de la ubicación y condición de la carga, lo que mejora la capacidad de respuesta ante inconvenientes. 
  • Costos ocultos. Tales como las tarifas portuarias, los recargos por demoras, almacenamiento y otros gastos adicionales que surgen durante el proceso de transporte. 
  • Resiliencia y contingencias. La gestión del transporte marítimo debe incluir planes para hacer frente a situaciones de última hora, como retrasos por condiciones climáticas adversas o problemas en el puerto de destino. 

 

Factores que intervienen en el transporte marítimo 

 

El transporte marítimo, como uno de los pilares del Comercio Internacional, está influenciado por una serie de elementos que desempeñan un papel en su funcionamiento y eficiencia. 

 
Los mismos pueden dividirse en diversas categorías y comprender su interacción es esencial para una gestión efectiva: 


  1.  El tipo y la cantidad de la carga. Dependiendo de las características de la mercancía que se quiere transportar, se debe elegir el tipo de buque más adecuado, así como la capacidad, el espacio y el equipamiento para garantizar la seguridad, la calidad y la eficiencia del traslado. 
  2. Distancia y rutas marítimas. Los trayectos más largos implican tiempos de tránsito más extensos y mayores costos. Es por eso que su selección marca una diferencia significativa. 
  3. Tarifas y costos. Además de los precios de flete, es básico tener en cuenta los montos portuarios, que incluyen tasas de atraque, manipulación de carga y otros gastos asociados al puerto de escala. 
  4. Regulaciones. El transporte marítimo está sujeto a una variedad de normativas internacionales y locales que abarcan desde la seguridad de la carga hasta las restricciones medioambientales y las aduanas. 
  5. Economía global. Las tendencias económicas del mundo como las fluctuaciones en los precios del petróleo, el crecimiento económico de las regiones y las dinámicas del comercio internacional, tienen un impacto significativo en el transporte marítimo. 
  6. Origen y el destino. Hay que considerar el tiempo estimado de tránsito, los posibles retrasos o incidencias que puedan ocurrir durante el viaje y las medidas de seguridad o prevención que se deben adoptar. 
  7. Los agentes que intervienen. Para que el transporte marítimo de mercancías se lleve a cabo a la perfección, es necesaria la acción de una serie de sujetos que participan en las distintas fases del proceso: 

 

  • El expedidor. Es la persona o empresa que envía la mercancía y que contrata el servicio de transporte marítimo. 
  • El transitario. Es el intermediario entre el expedidor y el transportista. Se encarga de gestionar desde la contratación del buque hasta la entrega. 
  • El transportista. Es la persona o empresa que lleva la mercancía por vía marítima. Puede ser el armador (el propietario o explotador del buque) o el fletador (el que alquila el buque o parte del mismo). 
  • El destinatario. Es la persona o empresa que recibe la mercancía en destino. Debe verificar que la carga llegue en buen estado y conforme a lo acordado con el expedidor. 

 

Cómo se determina el precio de transporte 

 

Al momento de definir el precio de transporte marítimo hay que pasar por un proceso que involucra múltiples elementos que son evaluados para establecer tarifas justas. Algunos de ellos son: 

 

  • Flete. Es el costo principal del transporte marítimo, que corresponde al traslado del contenedor desde el puerto de origen hasta el destino. 

 

Por lo tanto, lo establece y lo cobra la naviera y generalmente está en función del peso y el volumen de la carga. 

 
También incluye otros extras como el BAF (recargo por combustible), el CAF (por tipo de cambio), el GRI (por aumento general de tarifas) o el de piratería. 

 

  • Gastos en puerto. Son los costos asociados a las operaciones de carga y descarga en las terminales portuarias, así como a la utilización de las instalaciones y los servicios. 

 

En este caso incluye el THC (gastos de manipulación en terminal), la T3 (tasas portuarias) y documentación o BL (conocimiento de embarque). 

 

  • Pago de transporte terrestre. Se refiere a los costos vinculados con el traslado del contenedor desde o hasta la terminal portuaria, utilizando camiones, trenes o barcazas. 

 
Los mismos dependen de la distancia, el tipo y el tamaño del contenedor, así como del INCOTERM acordado entre el exportador y el importador. 

  •  Impuestos y las tasas aduaneras. Se trata de los tributos que hay que pagar por la importación o la exportación de mercancías, según las normativas y los aranceles vigentes en cada país. 

 
Se calculan a partir de los códigos HS o códigos arancelarios, que clasifican las mercancías según su naturaleza y su origen. 


  • Tipo de carga. El volumen y el peso afectan la tarifa, ya que determinan el espacio requerido y los equipos de manipulación necesarios. 
  • Distancia. Rutas más largas implican mayores costos de combustible y tiempo de tránsito, lo que se traduce en tarifas más altas. 
  • Tamaño y capacidad. Los barcos más grandes pueden manejar mayores volúmenes de carga, lo que da como resultado precios más económicos por unidad. 
  • Temporada. Durante períodos de alta demanda, como la navideña, las tarifas tienden a aumentar debido a la competencia por el espacio en los barcos. 
  • Contratos. Los acuerdos de flete, su duración y los pactos comerciales específicos con las navieras influyen en el precio. Por ejemplo, los que son a largo plazo ofrecen tarifas más estables y beneficiosas. 

 
¿Cuáles son los factores que afectan al costo de transporte marítimo? 

 

Como ya hemos mencionado, el costo asociado al transporte marítimo depende de varios aspectos, tales como el volumen total de la carga, la ruta a seguir y los gastos de atracar en los diferentes puertos, así como cualquier recargo que la compañía naviera. 

 
Sin embargo, hay que destacar que existen otros elementos que también tienen un impacto directo, los cuales detallaremos a continuación: 


  •  GRI o General Rate Increase (Aplicación del incremento de precio). El término GRI se relaciona con el aumento de costos establecido por las compañías navieras. 


Estas empresas acuerdan un incremento en las tarifas para ciertas rutas durante un lapso específico del año y se implementa una semana después. 

 

  • Temporadas. La demanda sigue un patrón cíclico, lo que da lugar a temporadas de alta y baja. En particular, la que va desde julio hasta noviembre es cuando los costos alcanzan su punto más elevado en este sector. 

 

Sin embargo, también surgen situaciones excepcionales o contingencias particulares que lleven a contratar un mayor número de trabajadores para satisfacer las exigencias de la industria logística. 

 
Un ejemplo de estos incrementos son los vinculados con el Año Nuevo Chino y la Semana Dorada en Japón, que ocurren a fines de abril y principios de mayo. 

 
Durante estas fechas, todas las empresas que desean enviar mercancía a ambos países generan una saturación en la capacidad de los puertos, lo que ocasiona un aumento en el costo por contenedor. 


  •  Recargos ocasionados por emergencias e imprevistos o EBS (Emergency Bunker Supercharge). Se tratan de tarifas adicionales que las compañías navieras imponen cuando sus embarcaciones necesitan atravesar áreas de alto riesgo, ya sea debido a conflictos bélicos, amenazas de piratería u otras circunstancias similares. 
  • Cambios efectuados por el transporte terrestre.  Cuando se producen incrementos notables en los costos del transporte por carretera o si los transportistas no pueden satisfacer la creciente demanda en ese medio, a menudo se recurre al marítimo como alternativa para superar estos desafíos. 

 

Conclusión 

 
En el mundo del transporte marítimo, la determinación del precio final es un proceso influido por una multitud de variables. 

 
Desde la elección de rutas hasta la naturaleza de la carga y las regulaciones gubernamentales, cada detalle cuenta en la búsqueda de la eficiencia y la economía. 



A medida que el comercio global sigue creciendo y cambiando, la capacidad para comprender y gestionar estos factores se convierte en una ventaja competitiva clave. 

 
En
KENSA Logistics estamos comprometidos a ayudarte a navegar por el complejo escenario del transporte marítimo. 

 
Nuestros expertos en logística te brindarán asesoramiento personalizado y soluciones adaptadas a tus necesidades específicas. 

 
Así que, ¿estás listo para optimizar tus costos y mejorar la eficiencia de tus operaciones? 


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