Transparencia y sostenibilidad ambiental: las exigencias de la generación Z

Hiperconectados y sociales

La generación que los sociólogos denominan Z está comprendida por las personas que hoy tienen entre 11 y 27 años. De ellas se han analizado diversos aspectos. Sabemos que es una generación que se mueve plenamente en el ámbito digital y que vive hiperconectada. Tiene una mente mucho más abierta que la de cohortes anteriores y siente una permanente preocupación por diversos temas sociales entre los que se encuentran, de forma especialmente importante, el feminismo y el cambio climático.

Es también una generación que vive, trabaja y consume de forma diferente. Sus integrantes no quieren vivir deprisa, sino saborear el instante; no quieren un empleo para ganar dinero, sino para sentir que están creciendo personalmente; no desean consumir sin más, sino hacerlo de forma consciente y sintiendo que lo que compran merece la pena.

El valor de la sostenibilidad

Para la generación Z, la sostenibilidad tiene un significado más profundo que para el resto de las personas consumidoras. Aprenden cada día más sobre la necesidad de cuidar el planeta y cómo conseguirlo (utilizan para formarse las plataformas de tv, videos de youtube o blogs) y por eso buscan un consumo responsable.

La mayoría de estas personas jóvenes se preguntan, antes de hacer una compra, si realmente necesitan ese producto. Y, por supuesto, eligen siempre empresas comprometidas a largo plazo con el medio ambiente. En KENSA somos especialistas en ofrecer servicios logísticos pensados y estructurados en base a estrategias de reducción de emisiones. De hecho de forma activa participamos en proyectos que ayudan a reducir las emisiones de CO2, como el caso del transporte de infraestructuras de eneregías renovables, así que hablamos por experiencia cuando aseguramos que estamos comprometidos con hacer realidad este cambio que tanto necesitamos para cuidar la sostenibilidad de nuestra sociedad.

Propósito, honestidad, compromiso con la sociedad y el planeta. La generación más joven pide todo eso. Y como son conscientes de que el greenwashing existe y que muchas marcas se colocan la medalla de la sostenibilidad sin merecerlo, también exigen transparencia. Ante estos desafíos la pregunta es: ¿qué estamos haciendo las empresas para cumplir con unas expectativas tan altas?